martes, 16 de septiembre de 2008

Rouco atribuye la Guerra Civil a que "el hombre había pecado mucho, sobre todo contra Dios"

Defiende el Valle de los Caídos como “símbolo de reconciliación”

En una misa celebrada este domingo en la abadía benedictina del Valle de los Caídos, el cardenal arzobispo de Madrid y presidente de los obispos españoles, Antonio María Rouco Varela, defendió la continuidad del lugar como “símbolo de reconciliación” y superación de “divisiones y odios”. El cardenal aseguró que hace cincuenta años, cuando se concluyó la basílica que se empezó a construir tras la Guerra Civil, “el hombre había pecado mucho y sobre todo, contra Dios, y cuando se vive una etapa de negación de Dios es muy fácil que luego los hombres luchen entre ellos”.
"El hombre había pecado mucho"

Para el cardenal, la cruz que preside el conjunto del Valle de los Caídos “era y es señal de reconciliación de los hombres entre sí” y se erigió porque “entonces el hombre había pecado mucho y sobre todo, contra Dios, y cuando se vive una etapa de negación de Dios es muy fácil que luego los hombres luchen entre ellos”, según recoge el diario La Razón.
Ahora también se está pecando

Las advertencias de que el pecado de “la negación de Dios” está muy extendido y que el Gobierno socialista ejerce un “laicismo radical” y excluyente con la Iglesia constituyen dos de los pilares del discurso actual de la jerarquía católica española. Por ejemplo, durante su discurso de investidura como honoris causa por la universidad católica CEU Cardenal Herrera, el cardenal arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, advirtió de que “el problema radical de nuestra sociedad es la negación de Dios”, y que éste “asume cada día con más fuerza en algunos países la forma de un laicismo, más o menos oficial, radical e ideológico”. Además de la Guerra Civil, para el presidente de la Conferencia Episcopal la negación de Dios también fue el motivo de otros enfrentamientos bélicos como la Primera Guerra Mundial.
Alabanzas de Rouco al abad cruzado

Durante su homilía de este domingo, Rouco alabó la labor de los monjes benedictinos del Valle de los Caídos, con cuyo abad, Anselmo Álvarez, concelebró la misa. Álvarez es un conocido defensor del franquismo que ha utilizado su abadía para celebrar misas de homenaje al dictador. En una entrevista publicada por El Mundo, el abad defendía que "Franco unió los símbolos de lo fundamental de España: cruz, templo y basílica” o que "lo español y lo católico van unidos" ya que "España se sostiene en Dios”. También alertaba del riesgo musulmán: "En 15 o 20 años, van a venir con su bagaje técnico pero también con el Corán bajo el brazo y vamos a tener que sacar nuestro Evangelio, si es que queda algún ejemplar para defendernos de esta invasión”.

2 comentarios:

ALFONSO dijo...

!Que triste mundo el nuestro!...
antes se fisiona el atomo,que un prejuicio.
Albert Einstein.

Este no es ni mucho menos el comentario que me gustaria poner,pero que se puede esperar de alguien que tiene diariamente la osadia de usar caliz de oro con anillo emblemas
y cruces del mismo metal,para invocar El Santo Nombre de Dios y recordarle el crimen que se cometió con El hace mas de dos mil años,aqui en este planeta.
De esa gentuza! está el mundo lleno,y espiritualmente sus palabras a mucha gente no les dicen absolutamente nada.

Bajo el Sur dijo...

"Osadía de usar caliz de oro con anillo, emblemas y cruces del mismo metal para invocar El Santo Nombre de Dios....."

Que bien dices Alfonso..... cuanta hipocresía, cuanta mentira y cuanto daño innecesario.
Besos desde Málaga